02 de juny, 2014

Chick Corea, un día «magistral»



Por Maurizio Dos Santos

El pianista Chick Corea ofreció el viernes por la tarde en el Conservatori del Liceu de Barcelona una vibrante clase magistral que deleitó a los 300 estudiantes que acudieron a escuchar y ver en directo al maestro de Boston. Aunque en principio la clase magistral debía ofrecerla en solitario, Corea reclutó para su experiencia a un buen amigo suyo, el bajista catalán Carles Benavent, y a un batería también catalán a quien conoció el jueves por la noche, Roger Blàvia. "Me ha parecido que era una manera muy buena de demostrar a los estudiantes cómo trabajo yo", explicó el pianista al director del festival de jazz de Barcelona, Joan Anton Cararach. "No soy tanto de hablar sobre música como de trabajar, ir probando, buscar e investigar". 

Además de improvisar con la sección rítmica reclutada a última hora, Corea animó a los estudiantes a hacerle cualquier pregunta. Desde su experiencia con Miles Davis –"todo el mundo me pregunta por ello, y quizá muchos no saben que lo escucho desde que tenía 6 años, en 1947"– y con Paco de Lucía –"lo conocí en 1972 y nunca dejamos de ser amigos, él me introdujo de lleno en el flamenco"– hasta qué pensaba de los movimientos históricos en el jazz: "Lo único importante es que cada uno tiene su opinión: aficionados, periodistas, críticos, músicos". "Por eso os aconsejo una cosa a todos: cada uno debe tener su propio punto de vista", remató.

Preguntado por un estudiante llamado Aki Virta sobre cómo escribía una canción o pieza, Corea puso un ejemplo: invitó al estudiante a subir al escenario y sentarse de frente a él en el piano para escribir un "retrato" con sus notas. Una joven pianista, Laia González, le preguntó sobre cómo podía mejorar su precisión tocando. Corea también la invitó a subir al escenario, pero esta vez para que la propia estudiante tocara el piano y él pudiera aconsejarle mejor.

Otra pregunta que dio mucho juego fue qué tipo de música escucha Chick Corea en su casa o cuando no está tocando. Para responderla, el pianista echó mano de su iPod y empezó a poner ejemplos de lo que estaba escuchando en este mismo momento: el segundo disco de un joven pianista cubano, Alfredo Rodríguez ('Invasion Parade'), las hermanas Labèque tocando Bartók, un disco de Billy Childs, el cuarteto de John Coltrane…

Inquirido sobre cómo aprende música nueva, Corea lo demostró con una composición brasileña, 'Folhas Secas' –"la versión de Elis Regina es estremecedora", confesó–, que aún no está en su repertorio. Para terminar la clase, Corea, Benavent y Blàvia tocaron, en homenaje a Paco de Lucía, su composición 'Ziryab', que Corea no había tocado nunca antes.


Esta clase magistral concluía un ciclo de seis clases en el Conservatori del Liceu patrocinado por la Fundación de Música Ferrer-Salat que ha incluido a músicos como, entre otros, el pianista Alexei Volodin y el violonchelista Jean-Guihen Queyras. Iñaki Sandoval, pianista y director del departamento de jazz del Conservatori del Liceu, muy satisfecho por una clase magistral que calificó de "excepcional, tanto por la maestría de Chick como por la energía y el entusiasmo compartidos con los alumnos", anunció también que para el próximo Voll-Damm Festival Internacional de Jazz de Barcelona (de octubre a noviembre del 2014) ya cuentan con clases confirmadas de, entre muchos otros, Gary Burton, Dave Douglas, Joe Lovano y Chucho Valdés, que ofrecerá un seminario exclusivo alrededor de la música de Irakere.

Por la noche, Chick Corea continuó deslumbrando en el Teatre-Auditori de Sant Cugat a una audiencia que cayó rendida ante su generosidad y bonhomía. Aunque el concierto estaba previsto en un solo set de 90 minutos, Corea decidió dividirlo en tres partes; entre la segunda (en la que invitó a dos espontáneos a subirse al escenario para tocar a cuatro manos) y la tercera, avisó al público que lo que venía (una parte a trío con Carles Benavent y Roger Blàvia) era un «extra», así que quien quisiera podía irse. Pocos se fueron, claro.

Tres horas después, la cara de felicidad de muchos asistentes (algunos de ellos habían participado también en la clase magistral invitados por el propio teatro) dio pie a pensar que cada 30 de mayo debería ser el Chick Corea's Day. 

Éste fue su repertorio:

Solo (primera parte)

* It could happen to you (Jimmy van Heusen).
* Desafinado (António Carlos Jobim)
* Turn out the stars (Bill Evans)
* Very early (Bill Evans)
* Work (Thelonious Monk)
* Pastime paradise (Stevie Wonder)
* Mazurka en la menor, opus 17, n. 4 (Chopin)

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Solo (segunda parte)

* Armando's Rhumba (Chick Corea)
* Continuance (Corea)
* Duo improvisado I
* Duo improvisado II
* Children's songs - selecció (Corea)

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Trío – Carles Benavent, Roger Blàvia

Folhas secas (Nelson Cavaquinho)
The yellow nimbus (Corea)
Ziryab (Paco de Lucía)